Hace poco que ha nacido en Malasaña el Edén para los amantes del trigo inflado: Cereal Hunters (C/ Mejía Lequerica, 14). Lo que para muchos puede que sea el punto máximo del postureo, para otros (incluidos nosotros) es todo un paraíso de color azucarado y crujiente.
Yo me confieso adepta de los cereales en la mayoría de sus versiones, tanto que cuando estuve de Erasmus mi alimentación se basaba en los diferentes tipos de cereales que había en el país en el que estaba. Por eso, cuando supe de la existencia de Cereal Hunters, mi estómago y mis ojos se emocionaron al unísono.
Tengo que admitir que no esperaba encontrar a tantos amantes de los cereales como yo cuando fuí al local: las mesas estaban llenas y en la barra los más indecisos hacían que mis ganas de tener entre mis manos uno de sus tazones se multiplicaran.
Si sois personas indecisas lo vais a pasar mal, porque entre el colorido de las cajas que decoran todo el bar, sus 25 tipos de leche y sus más de 150 tipos de cereales, lo vais a tener complicado.
Hay tres tamaños de boles para elegir (pequeño, mediano y grande) y además, puedes teñir la leche que elijas (sin lactosa, de almendra, de oveja, de soja, de alpiste o de espelta entre otras cuantas) del color que quieras. Después te toca lo más difícil: elegir unos cereales: Froot Loops, Reese’s Puffs, Hershey’s o Special K de un montón de variedades.
Lo mejor es que puedes elegir dos tipos de cereales para tu tazón, así la decisión es un poco menos difícil, pero justo después te toca volver a decantarte por alguno de los toppings que puedes añadir a tus cereales. Los hay sanos: fruta (fresca o deshidratada) y los hay más gochos, como los Filipinos, las lágrimas de mantequilla de cacahuete o los marshmallows (AKA nubes de chuche).
Yo elegí los Reese’s Puffs y los Curiously Cinnamon Crunch con las lágrimas de mantequilla de cacahuete, algo ligerito, como podéis observar. El contraste con la leche fresquita era increíble, lástima que no puedas comprar las cajas de cereales para llevar, porque hubiésemos necesitado un carro de la compra para transportar todo lo que nos hubiésemos llevado.
Por suerte, sí que tienes la opción take away del tamaño del bol que elijas para que puedas llevarte a casa los cereales que más te gusten o puedas ir probando unos diferentes cada vez, aunque nosotros preferimos el encanto del local…
Aunque la cosa no va sólo de cereales, ya que también preparan unas galletas de cereales con diferentes rellenos que calientan al momento (ñam, ñam), batidos, tartas, y tostadas tan originales como la de plátano, fresa, queso Philadelphia y miel.
Nosotros estamos encantados con Cereal Hunters y no vamos a esperar al desayuno para disfrutar de sus cereales, ¡los vamos a convertir en nuestro plato principal!