Llevo años creyendo que este evento tiene que ver con coches, motos y otros vehículos, así que imaginaos la cara que puse la primera vez que la amiga más indie que tengo me propuso ir. Me extrañó muchísimo, para ella el “Porsche” es algo que sale en las pelis americanas y la Vespa, la moto de “Tres Metros Bajo el Cielo”.
No, esto va de moda, artículos de decoración, bicis y chuminadas varias. El Mercado de Motores es un evento que se celebra el segundo fin de semana de cada mes en el Museo del Ferrocarril (Paseo de las Delicias, 61). Intenta imitar al Candem Market de Londres y la verdad es que tiene bastante éxito. Esto último lo digo porque aparecimos a eso de las doce y media y no cabía ni un alma. Hay que ir con bastante antelación, así que nada de irse de juerga la noche anterior, que hay que madrugar.
Tiene su gracia que entre vagón y vagón de locomotora puedas encontrar de todo y cuando digo de todo, es de todo (ríete de los «Gran Bazar» ). No sé si es por el postureo o porque los muebles del S XIX se han vuelto a poner de moda, pero estaba repleto de sillas y mesas de la época de las calzas y los sombreros de copa. En otras palabras: de casa de abuela. Oye, no tiene nada de malo. También es tendencia entre las chicas robarle las blusas estampadas a la yaya y entre los chicos, imitar la barba del yayo ¿No? Vamos, que si reniegas del catálogo del IKEA y prefieres una decoración más acorde con los nuevos tiempos, más vintage (risas), has hecho parada en el sitio indicado.
El mercado también tiene un espacio para que los artesanos profesionales puedan exponer sus productos y darse a conocer (ideales para regalarle una joyita a la pareja).. También hay productos ecológicos, juguetes, cachivaches… No es un mercadillo de pueblo o barrio, precisamente.
Si eres de los que pillan las mejores ofertas en El Rastro y sabe lo que es un pop up, a través de Fever puedes encontrar eventos tan guays como este. Está claro que comprar en Inditex y el Primark se ha vuelto muy mainstream [wp-svg-icons icon=»tongue» wrap=»i»]