En 2025, para reducir los tiempos de viaje y el ruido de los trenes que circulan en la línea 6 de metro, se llevarán a cabo obras que durarán (en principio) seis meses. Por ello, de junio a septiembre cerrará el tramo entre las estaciones de Moncloa y Méndez Álvaro. Desde finales de septiembre hasta diciembre, lo harán las estaciones entre Moncloa y Legazpi.
La nueva L6 sustituirá las traviesas de madera y los tacos sobre plataforma de hormigón por una superestructura con placas de última generación. Además, tendrá un trazado optimizado y un modelo de circulación automática. Sí, habrá trenes sin conductor a partir del próximo año para garantizar un servicio más rápido (se prevé que las esperas no superen los dos minutos).
Estas remodelaciones se enmarcan dentro del Plan Estratégico de Metro de Madrid, que ampliará y modernizará toda la red ferroviaria madrileña hasta el año 2030. Los principales objetivos del proyecto son multiplicar por cinco la regularidad de los desplazamientos, conseguir una conducción más homogénea e incrementar la capacidad de viajeros por hora.
La Línea 6 del Metro de Madrid es uno de los trayectos circulares más frecuentados de la ciudad. Conecta 28 estaciones estratégicas. Entre ellas, tres puntos clave con terminales de autobuses integradas: Moncloa, Avenida de América y Méndez Álvaro. Estas estaciones permiten la conexión directa con otras áreas de la Comunidad de Madrid y de España sin necesidad de salir al exterior, lo que las convierte en nodos de transporte fundamentales. Además, la L6 facilita el desplazamiento desde barrios periféricos hacia zonas cercanas al centro de la capital, brindando acceso rápido y eficiente a múltiples áreas urbanas.