Madrid ha aumentado su seguridad ante los sucesos terroristas ocurridos la semana pasada en Barcelona.
Estas medidas se llevaron a cabo pocas horas después del atentado de la Ciudad Condal y consisten en la colocación de bolardos y maceteros de piedra en las principales calles del centro. No es la primera vez que se toma esta decisión, pues se lleva realizando desde las pasadas navidades cada vez que hay eventos multitudinarios en la ciudad.
Aunque no se especificaron las zonas exactas de su colocación, si estás por el centro podrás verlos en las calles más transitadas de Madrid, como Preciados o Fuencarral, en la que también hay una gran presencia de la Policía Local y Nacional.
La instalación de los dispositivos fue llevada a cabo por el Ministerio del Interior, puesto que es la organización encargada de los dispositivos de seguridad en materia de terrorismo. Así mismo, también se ha pedido a los agentes que lleven sus chalecos en todo momento y que se coloquen en puntos en los que sean bien visibles para los ciudadanos, ya que de esta forma se les ofrece una sensación objetiva de seguridad.