La cultura española es de salir a la calle haga frío o calor, de cervezas a horas intempestivas y, en general, de exprimir al máximo cada día. Llevamos en la sangre celebrar la vida, y eso se ve reflejado en que, pese a tener un sueldo medio de 18.200€ ―muy por debajo de los que encontramos en países europeos como Alemania (31.600€) o Francia (28.700€)―, el cafecito en la terraza del bar no nos puede faltar, ni las copas con amigos o compañeros de trabajo después de una jornada laboral.
Esta tendencia se demuestra en la última Encuesta de Presupuestos Familiares publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Señala que, de media, los españoles gastamos más de 1.300€ en ocio gastronómico durante el año 2023, y que los ciudadanos de la Comunidad de Madrid superamos esa cantidad.
Madrid, más que nunca, capital de los bares
Madrid es la tercera comunidad que más gasta en bares y restaurantes. Aproximadamente, invertimos 1.532,25€ al año por persona en comer y beber fuera de casa. El País Vasco (1.751,98€) y La Rioja (1.728,33€) son las únicas CCAA que nos superan en la encuesta.
Según el INE, los perfiles que más dinero invierten en este sector ―tanto en Madrid como en el resto del país― son las parejas con y sin hijos. Esto se puede ver en el análisis del gasto medio por hogar. En Madrid se desembolsan alrededor de 3.907,52€ por familia en hostelería, la cifra más elevada de los últimos 10 años, superando incluso la del 2019, año en el que se llegó a los 3.842,48€.
El resultado de Madrid puede sorprender teniendo en cuenta que es una de las comunidades autónomas con mayor gasto medio por habitante (14.650€) y que la cifra ha subido desde 2022 pese a la hiperinflación y crisis como la de la vivienda. La mayoría de españoles invierten 5.127,77€ en pagar su renta o hipoteca, lo que equivale un 35% de su gasto total por año.