El Museo del Prado está un paso más cerca de que se materialice la restauración y ampliación del Salón de Reinos de Buen Retiro, el que era el antiguo Museo del Ejército. El Ayuntamiento y la pinacoteca han firmado ya el convenio por el que se llevará a cabo la rehabilitación y reintegración urbanística del entorno que rodea a la zona.
Según exponía la pinacoteca cuando anunció el proyecto ganador, esta rehabilitación «rentabilizará al máximo el uso museístico del edificio», abrirá el nuevo Campus del Prado al exterior y, al mismo tiempo, mejorará la unidad entre los distintos edificios que lo componen. El proyecto, de nombre Traza Oculta, es una propuesta del equipo formado por Foster + Partners L.T.D. y Rubio Arquitectura S.L.P.
Entre las intervenciones previstas se encuentra la habilitación de nuevos accesos al edificio, que garantizarán la accesibilidad universal y tendrán una mejor orientación respecto al resto de inmuebles del Museo. También se construirá un túnel que conectará distintos espacios de las instalaciones y se restaurarán las seis esculturas de la terraza del edificio con autorización del Ayuntamiento, a quien pertenecen dos de ellas.
Bajo el suelo, se llevarán a cabo labores de mantenimiento entre la fachada sur del Salón de Reinos y la fachada norte del Casón del Buen Retiro, así como en la escalera norte, la escalinata y la rampa sur de acceso al edificio rehabilitado. Por otro lado, la ampliación añadirá 5.700 metros cuadrados al Museo, de los cuales casi 2.600 se utilizarán como espacio expositivo.
Con estas obras de rehabilitación y ampliación la pinacoteca quiere crear «un espacio alternativo en el que el Museo Nacional del Prado podrá terminar de desplegar todo el potencial de sus colecciones y actividades, ampliando la extraordinaria oferta cultural y artística del eje Prado-Recoletos«, según ha señalado en una nota.
Las obras tendrán una duración prevista de tres años aunque, según expuso el mes pasado el director del Museo del Prado, Miguel Falomir, al tratarse de un edificio histórico «uno sabe cuándo empieza, pero no cuándo acaba”.