Sería necesario haber estado en coma cinco años, no tener televisión ni acceso a ninguna fuente de información o haber vivido en una cueva durante el último lustro para no saber quién es Ara Malikian. Es más, en esos tres supuestos, sería posible que incluso sin querer te hubieras enterado de la mera existencia de este inclasificable violinista, que va a dar un concierto en el Wizink Center este domingo.
Y es normal: si no es por un concierto digital en 360º en Callao, es por haber llenado teatros en París, en Roma o en Londres. El caso es que es sumamente difícil encontrar a alguien que no sepa quién es Ara Malikian. ¿La rareza de esta popularidad? Su inclasificabilidad y el hecho de que sea violinista (también es complicado enumerar tres violinistas contemporáneos): Ara Malikian es una estrella de rock que no toca rock.
Ahora (en mayo), para contribuir a ampliar la ristra de adjetivos que le acompañan, ha publicado Royal Garage, un disco irreverente. Un disco de muchas características que suma colaboraciones con gente tan dispar como Calamaro, Estrella Morente, Bunbury o Kase o.
En palabras de Malikian, el sentido del disco es el siguiente: “Mi relación con los garajes empezó en 1976, cuando estalló la guerra del Líbano, en el mundo entero las bandas más modernas ensayaban en garajes, sacaban de ahí sus sonidos y creaban un estilo que cambiaria la historia de la música”.
Es decir, bebe de ese espíritu y lo vuelca en cada interpretación. Cada interpretación, claro, que también toma forma en directo. Los directos de Malikian no hacen más que sumar adeptos y los de la presentación de este disco iban a celebrarse en junio, pero se tuvieron que retrasar porque el artista se cayó por las escaleras de un avión. Ahora, después de haber generado las expectativas suficientes, por fin llegará el momento esperadísimo: la toma de contacto del disco con la realidad. Será este domingo 6 de octubre a las 21:00 en el Wizink Center.