La experiencia más real y surrealista a la vez que habrás vivido.
Puede que alguna vez hayas visto una boda en Las Vegas y pensado que ojalá fueras esa novia o estuvieses allí. Incluso que hayas envidiado tanto la parafernalia que optaras por apagar la televisión. No serías el primero ni el último. Pues bien, ese show ahora llega por primera vez a España, y, aunque sin Elvis y Marilyn, promete ser una experiencia inolvidable y sin compromiso alguno. El próximo 26 de marzo podrás vivir una boda falsa en el Shoko madrileño.
Se trata de una iniciativa inspirada en el más puro estilo de Las Vegas y en el popular formato argentino de bodas falsas, donde surgió por primera vez en 2013 por parte de un grupo de veinteañeros. Al ver que nadie de su generación tenía intención de casarse, decidieron organizar una boda falsa. Se trata de un evento único en el que, cómo no, puedes elegir de parte de quién acudes, si del novio o la novia. Y es que dos actores darán vida a la pareja.
Igual que en la vida misma, la celebración consta de varias partes y detalles: una pequeña ceremonia inicial, una cena-cóctel, barra libre, decoración y sorpresas. Por supuesto, también estarán presentes todas esas preguntas que suelen aflorar en mitad de la ceremonia y que son más propias de un culebrón: ¿Dirá que sí? ¿De repente aparecerá un ex amante? ¿Alguno de los dos hará una confesión inesperada?
Los responsables de esta experiencia son los creadores de Bodas Falsas, la empresa especializada en eventos WeGame. Desde un inicio tenían claro que esta propuesta triunfaría en España. Ellos mismos lo explican así: «El formato en Argentina ha atraído a todo tipo de personas, pero especialmente a gente joven, veinteañeros. Cada vez se casa menos gente, y los jóvenes quieren tener la experiencia de ver cómo es una boda, con todo lo que la rodea: desde preparar el traje de etiqueta hasta bailar en la barra libre, o pelear por coger el ramo de la novia».
Desde Bodas Falsas, incluso se atreven a augurar algún que otro futuro prometedor: «Dicen que de una boda sale otra, así que, quién sabe: a lo mejor de nuestra boda falsa salen varias bodas ‘de verdad’».
Aunque, como todos sabemos, seguramente la parte más atractiva de una boda no sea el momento del ramo, ni siquiera la barra libre de cócteles y tapeo. Lo mejor de todo es el momento del baile. Y si de algo te hartarás en esta boda falsa es precisamente de bailar. Eso está más que asegurado.