
Según el barómetro publicado por el CIS en febrero de 2025, el 58,5% de los españoles considera tener una situación económica favorable, mientras que el 20,8% la ve desfavorable. El 40,2% diría que pertenece a la clase media, y el 16,5% a la baja. ¿Se corresponde la percepción de los encuestados con la realidad? No en todos los casos.
Para identificar el nivel socioeconómico de un individuo se debe consultar el informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que define la clase social según diferentes rangos de ingresos.
La OCDE identifica la clase media como el grupo de la población cuyos ingresos oscilan el 75% y el 200% de la renta familiar mediana. Actualmente, esta renta es de 18.316€ anuales en España (de media), por tanto los trabajadores con ingresos entre los 13.737 y los 36.662€ brutos al año pueden decir que son de clase media.
Sin embargo, la renta mediana puede dar cifras más elevadas en ciertas comunidades autónomas: en el caso de Madrid, País Vasco y Navarra, es superior que en el resto de España. En la Comunidad de Madrid, la media de ingresos anuales se situó en 24.991€ en el año 2023, un 36,44% más que la renta mediana nacional.
Siguiendo el análisis de la OCDE y teniendo en cuenta la media de ingresos en la capital, para ser de clase media en Madrid habría que ganar entre 1.500 y 4.000 euros mensuales. Es decir: entre 18.000 y 48.000 euros brutos al año.
¿Por qué tantos españoles se identifican con la clase media?
El profesor y economista Luis Ayala Cañón explicó para Newtral que los españoles tienden a identificase con la clase media porque «da unos niveles de integración elevados», mientras que pertenecer a clases más bajas «genera una serie de barreras» a nivel social. Curiosamente, a la hora de identificarse con clases altas también aparecen barreras. Según Ayala, «aunque tiene muchas ventajas sociales, puede tener cierta estigmatización social negativa».