Un tren cargado de oro, una hora para escapar de él. Enciérrate y juega a The Midnight Train.
Nunca hubiéramos imaginado que tendríamos que asaltar un tren de principios del siglo XX. Tampoco pensábamos vernos en la tesitura de robar cuatro millones de euros en lingotes de oro a un monarca exiliado. Pero en nuestro favor diremos que aceptamos la misión y conseguimos escapar indemnes de The Midnight Train.
Adoptar nuestros personajes, unos ladrones con mucha prisa a bordo del Bradbury Express, fue relativamente sencillo gracias a la elaboradísima ambientación de La Estación Escape Room, la sala de escape donde el juego cobra vida. Los asientos de madera, la decoración recargada y elegante, el mobiliario de época y hasta la luz tenue: todo indicaba que nos habíamos transportado a 1920 o 1930. Por la vía ferroviaria, claro.
Superada la impresión de tener que robarle la fortuna al rey Carol II de Rumanía en 60 minutos, nos encontramos dentro una escape room repleta de pistas originales (con algunas nos rompimos la cabeza, tenemos que reconocerlo) que hacían justicia al alto nivel narrativo de la historia y del escenario en el que se representa.
Pusimos ingenio y creatividad a trabajar al 100% para abrir puertas y cajones, desbloquear candados, interpretar señales y resolver puzzles: el tiempo corría sin piedad y el Bradbury Express no podía partir con nosotros dentro, o acabaríamos en la cárcel. Nuestro equipo lo consiguió, ¿lograrás tú salir de esta escape room?