La nueva tasa de basuras de Madrid ya está generando polémica y miles de contribuyentes comienzan a explorar la posibilidad de recurrirla. Desde este mes, los propietarios de inmuebles han empezado a recibir la notificación del pago obligatorio de la Tasa de Gestión de Residuos (TGR), aplicada por el Ayuntamiento como parte del cumplimiento de la Ley 7/2022 de residuos y suelos contaminados para una economía circular. La medida obliga a todos los municipios de más de 5.000 habitantes a cobrar una tarifa que refleje el coste real del servicio de recogida y tratamiento de basura.
El importe medio que pagan los madrileños ronda los 140 euros anuales, aunque varía según el valor catastral de cada vivienda y la cantidad de residuos generados en su barrio. La fórmula combina una parte fija, basada en el valor del inmueble, y otra variable, calculada según el nivel de reciclaje y la producción de basura de cada zona. Por ejemplo, barrios como Moratalaz, con mejores índices de separación de residuos, pagan menos, mientras que distritos más céntricos, como Sol o Chamberí, abonan tarifas más altas.
El pago se realiza a través del recibo del agua y los propietarios tienen dos meses desde la notificación para abonarlo. A partir de 2026, la tasa podrá domiciliarse y fraccionarse como el IBI, pero este primer año debe pagarse de una sola vez. La Agencia Tributaria de Madrid recuerda que es imprescindible abonar primero el importe antes de presentar cualquier reclamación, ya que solo los pagos efectuados pueden ser objeto de recurso administrativo o solicitud de devolución.
Cómo reclamar la Tasa de Gestión de Residuos
Ante las quejas vecinales y la falta de progresividad del modelo, el grupo municipal Más Madrid ha creado un formulario gratuito para recurrir la tasa. Disponible en su página web (masmadrid.org), la herramienta permite a los contribuyentes presentar una reclamación económico-administrativa ante el Tribunal Municipal sin necesidad de abogado. El formulario genera un escrito de alegación automático que, junto al justificante de pago, puede presentarse en el registro municipal o a través de la sede electrónica del Ayuntamiento.
El portavoz de la formación, Eduardo Rubiño, ha calificado la nueva tasa como “una chapuza injusta y mal diseñada” y anima a los madrileños a reclamar, recordando que “el Ayuntamiento podría haber creado un modelo progresivo que premiara el reciclaje en lugar de penalizar a todos por igual”. Las reclamaciones podrán presentarse durante el período voluntario de pago y hasta un mes después de abonarla, plazo que fija la normativa municipal para acciones de devolución.
Por su parte, el Ayuntamiento defiende que la tasa cumple la normativa estatal y europea, recordando que “supone un paso necesario para adaptar Madrid a las exigencias medioambientales comunitarias” y garantizar que quien genere más residuos pague más. Sin embargo, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) considera que el sistema es desequilibrado porque no refleja de forma justa la producción real de basura en cada inmueble y porque no existe un incentivo claro para quienes separan correctamente los residuos.