Hay muchas formas de volver a la infancia y Periquitos Park es una de ellas.
Hay distintas formas de retrotraerse a la infancia. Hay comidas que te llevan a un lugar concreto, hay olores que evocan esas sensaciones y también hay series de televisión o películas que consiguen despertar en nosotros una nostalgia imparable. Se dice, sin embargo, que a la infancia no se vuelve. Pero no es del todo cierto: no se vuelve a tener 6 años, eso está claro.
Pero sí que se puede volver a jugar como cuando teníamos 5 o 6 años. Y para muestra Periquitos Park, un centro de ocio para niños adaptado a adultos. Un poco como ser parte de Big, la mítica película de Tom Hanks, pero en Madrid.
Roberta Gonçalves, dueña de Periquitos, nos cuenta que llevan siete años en funcionamiento y cómo trabajan en estos momentos: “tomamos la temperatura a todos los clientes y niños antes de entrar al parque, el aforo está al 50%, tenemos gel hidroalcohólico y no mezclamos los grupos: son fiestas exclusivas”.
Disfruta de un brunch en Periquitos Park
Preguntamos también sobre cómo llegó a tener lugar este novedoso y peculiar concepto: “los padres iban con los niños a celebrar sus cumpleaños y nos preguntaban si podían entrar con los niños. Una vez pasaron los padres y desde entonces nos preguntaron los padres si podían hacer fiestas de adultos”.
Hablamos del recorrido y del funcionamiento del parque. Primero se hacen juegos fuera de la piscina: estos juegos dependen del grupo, pero un ejemplo de uno de ellos puede ser una carrera de sacos. Luego el grupo disfruta de ciertas actividades (incluso una gymkhana) en la propia piscina de bolas de cuatro alturas.
Y como punto final de la experiencia, como broche de oro o como colofón, los asistentes acaban un día tan especial en el lounge bar un brunch como la copa de un pino con un menú maravilloso y una impresionante barra libre de refrescos, zumo de naranja. Bien pensado, este plan tiene lo mejor de la etapa adulta y lo mejor de la niñez. ¿O no?