El Tren de la Seda conecta la capital española con Yiwu atravesando ocho países.
Dos veces a la semana el Tren de la Seda emprende su odisea rutinaria. Sale desde Madrid y recorre 13.052 kilómetros, pasando por Francia, Alemania, Polonia, Bielorrusia, Rusia y Kazajistán. Se detiene en Yiwu, la ciudad comercial china donde descarga su mercancía. Y, cuando termina, deshace todo el camino para volver a España.
Quienes hayan leído a Alessandro Baricco lo saben de sobra: la ruta de la seda no es poca cosa. Pero los tiempos, como la tecnología, han ido avanzando, y en la actualidad «solo» hacen falta 16 días para completar esta travesía intercontinental.
La del Tren de la Seda es la línea ferroviaria más larga del mundo, aventajando en longitud a la red transiberiana, que contabiliza 9.288 kilómetros de vías.
A lo largo del viaje, el ferrocarril Madrid-Yiwu se adapta tres veces al ancho de vía de diferentes países y ahorra 70 toneladas de emisiones de CO2 en comparación a la misma ruta por carretera.
¿Qué transporta el Tren de la Seda?
Lo sentimos por quienes padecen fobia a volar, pero este tren no admite viajeros. En sus vagones solo hay sitio para los productos de los bazares chinos, todas esas cosas de uso diario (y tirados de precio) sin las que ya no sabemos cómo vivir en Madrid.
De camino a China, el ferrocarril va cargado con productos ibéricos: aceite, jamón, vino español… Un intercambio fundamental entre el país oriental y España.
El Tren de la Seda cumple cuatro años
El 18 de noviembre de 2014 este tren arrancó rumbo a Yiwu por primera vez. Este año celebra su cuarto aniversario y, para conmemorarlo, el Ayuntamiento ha organizado un programa de actividades con la colaboración del Centro de Servicio de los chinos en Madrid y de la Fundación para el intercambio de Yiwu y España.
En Madrid se correrá una minimaratón solidaria y al mismo tiempo se celebrará la Maratón Internacional de Yiwu.
Durante tres días habrá exposiciones, actuaciones musicales y espectáculos artísticos.
A pesar de los 13.000 kilómetros de distancia, las ocho fronteras que nos dividen y todos los escollos del camino, Madrid y China estarán ligadas mientras el Tren de la Seda siga en circulación.
Foto de portada: El Confidencial