Si tienes entre 25-30 años (edad en la que comienzas a recibir muchas invitaciones a bodas) y la última vez que fuiste a una aún te sentabas en la mesa de los niños o en el limbo (esa zona en la que te sientan cerca de los primos más mayores, pero aún te sirven la carne empanada con patatas-AKA menú infantil), esto te interesa.
NO es un artículo sobre qué tenedor se utiliza en cada plato o cuando no llevar vestido largo. Es un consejo de tu mejor amigo/a para que conserves la dignidad (la poca que te queda después de la fiesta de despedida después de la boda de tus amigos y te sigan invitando a ver su nuevo piso o su nuevo bebé.
- La ropa: lo de que nadie debe ir vestido de blanco es un clásico, pero esto no es una revista de moda. Nos referimos a que si eres chico: por favor, nada de ponerte camisas de manga corta. Te aguantas y te pones una de manga larga remangada, pero no te vistas de testigo de Jehová. También se aplica a las corbatas chorras: evitadlas (por muy mejores amigo del novio que seáis). Respecto a las chicas: los tocados están de moda, vale, pero no llevéis uno tamaño nido de cigüeñas. Y lo de ir de corto en las bodas de día…vigilad el corto, porque podéis pasar de sexys a put…en cuestión de centímetros…
- Ligar: siempre se ha dicho que en las bodas se liga mucho, pero ¡ojo! porque la barra libre es muy peligrosa y lo que se puede hacer sutilmente y con miraditas entre los entrantes y el sorbete, puede acabar en fotos tuyas por todas las redes sociales liándote como si no hubiese un mañana con el cardo más feo del enlace.
- El alcohol: cuidado, porque durante la cena el camarero te llena la copa antes de que le avises y durante la barra libre empiezas a hacer sentir a tus amigos vergüenza ajena y te parece atractivo cualquier ser del sexo contrario (o del mismo).
- De una boda siempre sale otra boda: pero no le pidáis matrimonio a vuestro pichón cuando los novios están cortando el pastel o…simplemente, no lo hagáis ese día. Aunque penséis que es romántico, no lo es, quedaréis fatal.
- Anécdotas: por muy amiguismos-como-hermanos que seáis del novio o la novia, cuidado con lo que soltáis por esa boquita. No será gracioso contar la noche que no os dejaron dormir con el ligue de turno.
- Regalos: por favor, no seáis cutres. No se aceptan tiendas de los chinos como opción B a las listas de bodas. Si no sabéis qué comprar o lo que “sugieren” los novios se os va de las manos, optad por el sobre. Es sutil, elegante y clásico.