Madrid está ubicada en medio de una meseta. O sea, que no tenemos mucha montaña para escalar. Y la sierra de Guadarrama no nos pilla tan cerca como para apuntarnos a una excursión de alpinismo rapidita.
Lo bueno es que el rocódromo más grande del país está en nuestra ciudad, en la calle Julián Camarillo, 55. La idea original es de Chris Sharma, al que muchos llaman el mejor escalador de todo el planeta. Sharma Climbing Madrid es el nombre del recinto, y cuenta con unas instalaciones de vértigo.
Son 4.000 metros cuadrados escalables con alturas de hasta 19 metros para subir, subir y subir hasta donde puedas. Hay aproximadamente 150 bloques y 160 vías para conquistar, además de un muro de competición oficial de boulder de 30m de ancho. También te puedes poner a prueba en el kilterboard, el campus board y dos vías de velocidad homologadas por la IFSC.
El rocódromo cuenta con un gimnasio-escuela para niños y adultos, zonas para actividades y competiciones, área infantil y un bar con vistas al rocódromo para refrescarte cuando vuelvas a pisar el suelo. En la terraza de 400 metros se organizarán clases de yoga al aire libre y otros eventos.
Sharma Climbing Madrid apunta maneras para convertirse en un rocódromo de referencia a nivel mundial. Y tú ya no tendrás que irte muy lejos para sentirte en la cima del mundo.
Fotos: Sharma Climbing Madrid