¿Crees saberlo todo sobre el gigante de la Gran Vía?
Es el protagonista de miles de postales enviadas desde Madrid. No hay madrileño ni viajero que no levante la vista para contemplar el eterno cartel de Schweppes, sin importar que lo haya mirado ya cien veces.
El edificio Metropol es el sello de la Gran Vía, un monumento hecho a sí mismo que todos conocemos y, sin embargo, siempre nos sorprende con algún secreto muy bien guardado.
1. Un edificio con pseudónimo
Sentimos desilusionarte, pero «Capitol» no es su verdadero nombre. En realidad fue bautizado como edificio Carrión en 1933, en homenaje a Enrique Carrión, propietario del solar donde está construido.
Acabó adoptando su mote por ser la sede de los cines Capitol, que aún siguen abiertos. Difícilmente conocerás a alguien que se refiera a este edificio por su nombre original.
2. Bien fresquito desde los años 30
Nuestro querido Capitol fue el primer edificio de Madrid que tuvo un sistema de refrigeración centralizado. En sus inicios, los equipos de aire acondicionado ocupaban una planta entera.
3. El anuncio inmortal que sobrevivió al nuevo siglo
En 2007 la fachada del Capitol experimentó una limpieza publicitaria total… o casi. Todavía se mantiene el mítico cartel de Schweppes, que se ilumina siguiendo secuencias determinadas según la hora del día. Justo encima hay un letrero de Vodafone, aunque hace poco ordenaron su retirada.
Por el camino se perdieron los viejos anuncios de Camel, Grundig y Fortuna.
4. Olor perpetuo a palomitas
El lobby del hotel Vincci Capitol siempre huele a las palomitas de las salas de cine vecinas. Este no es el único secreto del hotel: las habitaciones 1002 y 1102 están justo detrás del letrero luminoso.
5. Protegido para siempre
El edificio Capitol se convirtió en Bien de Interés Cultural en abril de 2018, en reconocimiento a su valor icónico y arquitectónico. Es decir, que es oficialmente un monumento, y como tal será protegido por las instituciones españolas.
Pero, ojo al dato: el cartel de Schweppes no está salvado. Lo bueno es que el Gobierno regional no pretende deshacerse de él. La decisión de hacerlo desaparecer corresponde a la Comisión Local de Patrimonio. De momento, el rótulo de neón seguirá coloreando el cielo de Madrid.
Eso sí, las pantallas led de la fachada no pueden quedarse, ya que se debe mantener la esencia original del edificio.
6. Vistas privilegiadas desde un mirador de acceso libre
El hotel Vincci Capitol dispone de una terraza en la azotea a la que puede acceder cualquiera, sin que haga falta hospedarse allí.
Desde arriba pueden contemplarse dos de los tres tramos de la Gran Vía, y ser testigo de una imagen poco habitual del Palacio de la Prensa, la Torre de Madrid, el Edificio España, las Cuatro Torres e incluso de la Sierra de Guadarrama.
En tiempos de la Guerra Civil, la azotea fue utilizada como observatorio avanzado.
7. Primo lejano del Flatiron de Nueva York
Su estilo art decó, muy vanguardista para la época en que se construyó, ha sido comparado en muchas ocasiones con el Flatiron building, que también tiene forma de cuña. Podría decirse que el edificio neoyorquino en forma de plancha es un primo más mayor, delgado y alto de nuestro Capitol.
8. Un rodaje de altura
El Capitol participó en El día de la bestia, película dirigida por Álex de la Iglesia. En la escena donde aparece, los personajes de Santiago Segura, Alex Angulo y Armando de Razza se descuelgan por el letrero de Schweppes, aunque en realidad la audacia se grabó con una réplica exacta en el estudio.
El edificio también ha aparecido en El crack y El crack 2, de José Luis Garci.
¿Cuántos de estos datos sobre el Capitol conocías antes de leer este post?