La fe derriba montañas y la insistencia también. Tras muchos años demandando la eliminación de una barrera antinatural entre distritos, el “scalextric” de Puente de Vallecas está más cerca que nunca de desaparecer. Así se aprobó hace tres meses (por unanimidad) en el Pleno del Ayuntamiento de Madrid y así lo confirmó ayer el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida durante el Pleno del debate del estado de la Ciudad.
La propuesta fue planteada por Más Madrid y Paloma García Romero, titular del área de Obras y Equipamientos, se comprometió a iniciar el estudio de la viabilidad del proyecto. Un proyecto, por cierto, cuya ejecución tendrá lugar antes de que empieza 2022. En primera instancia, se hará una demolición parcial del puente.
García Romero confirmó ayer durante la comisión de Desarrollo Urbano que los trabajos de demolición durarán cinco meses y que la reurbanización de ese eje durará alrededor de doce meses.
El “scalextric”, que se abrió al tráfico en 1976, desaparecería para dar paso a un parque de 130 hectáreas. El proyecto se llama Conecta Vallecas y su nombre revela el primero de los beneficios de esta demolición: unir dos distritos (Retiro y Puente de Vallecas). De este modo, las estimaciones apuntan a que se mejoraría la calidad de vida de 100.000 personas y también se reduciría el ruido y la contaminación.