Mientras hay agencias de viajes con paquetes pensados solo para ciertas épocas del año en las que desde los lugares más extremos del hemisferio norte se pueden, con suerte, ver auroras boreales, este fin de semana en latitudes tan al sur con España se han podido observar con cierta facilidad. En la Comunidad de Madrid los afortunados que han sido testigos de este hecho tan poco común se encontraban en rincones alejados de la capital.
A media noche y desde puntos cercanos a la Sierra del Guadarrama, como el puerto de Navacerrada o Colmenar Viejo, es desde donde mejor se han podido observar, ya que es conditio sine quan non estar en lugar oscuro y con cielo despejado para verlas. En muchos casos solo fueron visibles a través de la cámara del móvil, especialmente en fotografías en modo noche o de larga exposición, como explicaban algunos usuarios en X.
Este caprichoso fenómeno requiere de unas condiciones muy concretas para ver el cielo en un baile de colores que nunca se sabe bien cuanto va a durar. La Agencia Estatal de Meteorología (AMET) ante la avalancha de fotos y preguntas ha explicado en un hilo en la red social X como se ha producido esta rareza.
El sol está en un máximo de actividad que es cíclico, ocurre aproximadamente cada década, lo cual provoca una gran tormenta geomagnética en la troposfera (entre 90 km y 150 km de altitud) y como explica la AEMET: «Las auroras aparecen por la interacción entre el viento solar y el campo magnético de la Tierra.»
¿Cómo se han podido ver auroras en Madrid?
La extrema actividad del sol ha sido calificada por la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica de EE. UU. como un hecho inusual e histórico. Tanto como para que el óvalo en que se emiten los fotones de luz con distintas longitudes de onda que conforman las auroras se expandan hasta llegar a la península.
Esta excepcionalidad alcanzó su punto álgido el pasado sábado y se ha alargado hasta la madrugada del lunes. Webs como SpaceWeatherLive publican las previsiones de que se produzcan auroras en diferentes latitudes, y ya anunciaban que esto podía suceder (y también que no parce que se vuelva a repetir). Pero aun teniendo los datos más aproximados del sol es difícil predecir si se van a dar todas las condiciones idóneas para verlas incluso en los lugares donde es más habitual.