Los vecinos de Alcalá cuelgan bufandas en las ramas para quienes necesiten protegerse del frío.
Empieza la recta final de noviembre y las temperaturas ceden terreno al invierno. El frío se adueña de Madrid, y mientras unos se entregan a la calefacción y chocolate caliente, otros se enfrentan a un problema grave de supervivencia.
No todo el mundo tiene ropa de abrigo ni edredones para entrar en calor. La asociación «Complutenses por el Parque O’Donnell» se ha acordado de las personas que duermen en la calle y ha colgado bufandas en los árboles del parque para todo el que necesite una.
II Bufanda solidaria en el Parque O´Donnell este sabado para que nadie pase frío. Muchas gracias a todos los que participasteis directa o indirectamente. pic.twitter.com/UF7BgrVxlR
— Complutenses por el Parque O'Donnell (@ParqueOdonnell) November 18, 2018
Cada una de ellas tiene un papel con un mensaje: «Si la necesitas, cógela. Una persona ha dejado esta bufanda para que sientas que se preocupa por ti. Ponla alrededor de tu cuello y siente la calidez y ternura con la que ha sido depositada».
Vecinas y vecinos de Alcalá han organizado así la II Noche de las Bufandas, poniendo su granito de arena en una práctica que se lleva a cabo en muchas ciudades europeas y de Estados Unidos.