Dar con una “sangre limpia” de la capital es más difícil que encontrar a Nemo pero haberlas (haylas). La buena madrileña tienen carácter, es urbanita y difícil de calar pero cuando lo consigues…está hecho.
La cuestión es…¿Cómo hacerlo?
Ellas son modernas: compórtate como tal
Ahora se llevan las gafas de pasta, los aros en la napia y los vaqueros remangados para dejar ver la marca de la zapatilla, mañana a lo mejor lucir un colador en la cabeza…Sí, las madrileñas son tan trendy que cuando aparece una moda, no la sueltan (hasta que llega la siguiente). Ponte al día, porque si ahora Arcade Fire son lo más, tendrás que saberte algún tema para impresionarla. Estará encantada de enseñarte la lista de bandas alternativas que ocupan su iPod para demostrarte lo actualizada que está. Eso sí, ni se te ocurra preguntarle cuál es su tema favorito de los Blue Windows porque o bien te responde que “no saben con cuál quedarse”, bien se queda en silencio, meditando cómo librarse de ese petulante que acaba de dejarle en evidencia.
Les gusta el postureo (y todo lo que acabe en -eo) pero en general son cultas: leen, van al cine y todo eso. Hazle sentir inteligente preguntando por su libro favorito o la última peli que vio en los cines Berlanga.
Gata salvajeee [wp-svg-icons icon=»music» wrap=»i»]
No, no es la intro pegadiza de una telenovela, es que ellas son así. Tienen mucho carácter y son tajantes en sus juicios, si no le gustas a la primera, olvídate. Su alma es felina: son independientes, curiosas y algo ariscas. NI SE TE OCURRA entrarle en una discoteca, a no ser que seas masoquista y te ponga que te rechacen a lo bestia. Entiéndelo, para ellas la noche está repleta de “babosos” y aunque seas el hombre de su vida y no lo sepa, te va a ver como uno más. Pero bueno, si aún así no puedes evitarlo, desecha la idea de pedirle bailar; es mejor darle conversación y si es interesante (de esas que hacen reflexionar), genial (bien hecho, campeón).
Eso sí, al salir de la discoteca como mucho intercambiad el whatsapp, te bufará un poco si propones acompañarle a casa. Ella no tiene miedo de andar sola por la calle y ahora mismo solo quiere abrazar la cama, así que de momento déjala en paz.
Primeras citas
¡Ha respondido a tu whatsapp! ¡Estupendo! Ha tardado días (les gusta hacerse las interesantes) pero lo ha hecho ¿Y ahora, a dónde te la llevas? Si tu respuesta es El Retiro..¡FAIL! Hay que sorprenderlas, descubrirles nuevos rincones de la capital. Si el plan es pasear, elige un parque atípico (aquí tienes algunas sugerencias) , si es comer o cenar…cuanto más raruno y extraño sea el sitio, más puntos ganas.
Ella va a llegar tarde pero no seas tú el impuntual. Durante el encuentro no trates de sorprenderla con tus hazañas personales, te va a cazar. Son astutas y se las saben todas; sé natural, que para chulitos ya están los madrileños.
Lo has conseguido…
Ha llegado el momento. Está sentada en tu sofá para tomarse la última. Sí, sé lo que estás pensando y tengo la respuesta: lo tienes casi hecho, chaval. Ya sé que las pelis dicen que “nada de sexo en la primera cita” pero mencionando a Joaquín Sabina: “las niñas ya no quieren ser princesas”. No te va a decir que no y lo vas a disfrutar (recuerda, gata salvajeeee). Si ya es sensual fuera de la cama, imagínatela dentro.
…
Después del encuentro no dudes en contactar con ella. A lo mejor te contesta en otro par de días pero cuando lo haga solo hay dos opciones: o que quiere volver a verte o que, amigo, bienvenido a la friendzone.