El Estado (a través del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana y en el contexto del Programa de Rehabilitación Arquitectónica) no ha escatimado en gastos ni en recursos para recuperar y hacer accesible la Iglesia de las Comendadoras de Santiago. El Gobierno ha estimado un gasto de más de 4 millones de euros que irán destinados a la rehabilitación de un edificio histórico de Madrid.
No tardará en iniciarse la segunda fase de unas obras que consolidarán la estructura (subestación eléctrica, cuarto de calderas) del templo. También se llevarán a cabo tareas de restauración en la propia iglesia, en el zaguán y en las torres del Convento. La primera fase de la rehabilitación, por cierto, tuvo lugar hace una década y permitió que el edificio fuese abierto al público el primer y el tercer lunes de cada mes.
Ahora el objetivo es que el primer conjunto conventual de Madrid pueda abrirse a la ciudadanía. Para ello serán necesarias obras relativas a la puesta en uso, el mantenimiento y la conservación.