Hace más de 20 años que el Lago de Casa de Campo no se ha vaciado. La última vez que se hizo fue en 1995 y desde entonces su deterioro es bastante apreciable.
El estanque sufre diversas grietas y desprendimientos que han provocado que el terreno que lo rodea se erosione y que las raíces de los árboles más próximos hayan quedado al descubierto. Por ese motivo, el Ayuntamiento de Madrid ha decidido que a principios de noviembre comiencen las obras de restauración del lago. Los trabajos de mejora incluirán el vaciado y la limpieza del vaso, además de la construcción de un nuevo muro de contención. Se calcula que el proceso durará 10 meses y que costará alrededor de 2,6 millones de euros.
La laguna cuenta con una capacidad de 160.000 metros cúbicos repartidos en los 80.150 metros cuadrados que ocupa. En ella viven 13.911 peces (que suman un total de 6,5 toneladas) que serán acogidos hasta que finalicen los trabajos de mejora. Entre las especies de peces se encuentran carpines, percasoles, gambusias y carpas comunes, pero cuando el estanque vuelva a llenarse solo se repoblará con especies autóctonas. Los peces exóticos y los enfermos serán sacrificados y el resto se soltarán en el Manzanares.
Las obras no solo se realizarán sobre el lago, ya que también se pavimentará la zona de paseo y se instalarán hamacas y bancos corridos (con y sin respaldo) en la zona del lago que hay frente a los quioscos (dónde la gente se sienta sobre el bordillo de ladrillo que hay entre una barandilla roja y unos árboles).
La zona del antiguo embarcadero se convertirá en un mirador, pues éste hace años que está en desuso y también habrá una zona convertida en «playa», aunque no será de arena, sino que se habilitará para que la gente pueda seguir tumbándose en ella como ahora hacen (se trata de la explanada donde se encuentra el ‘plátano gordo’, el árbol bicentenario de Casa de Campo).
Seguro que después de las mejoras mas de un plan de domingo acaba ahí.