¿Por qué es tan especial la Luna que veremos esta noche? Pues porque será la luna más grande y brillante que nuestros ojos podrán apreciar desde el 25 de enero de 1948. Han pasado 68 años desde entonces, por lo que, como podéis observar, no es algo que se pueda apreciar en cualquier momento, así que se trata de una noche muy especial.
Este fenómeno se podrá ver durante toda la noche, pero su hora de máximo esplendor será a las 1.52 de la mañana, por lo que si queréis disfrutarla así, tendréis que trasnochar. Os recomendamos cuáles serán los mejores lugares para verla:
Mirador del Cerro Hilo
Quizá sea la zona a la que más difícil os resulte acercaros, pues supone coger el coche. Sin embargo, estamos casi seguros de que será uno de los mejores lugares para disfrutar de una visión de 360º libre de contaminación y luces de la ciudad para ver esta luna en todo su esplendor. Esta es una de las muchas opciones de miradores que encontraréis en el Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama, porque está plagado de ellos.
Mirador de las Vistillas
Al ser un punto de encuentro más céntrico estará más concurrido, pero también será ideal para disfrutar de la superluna. Es una buena opción si vivís por el centro y no podéis escapar a las afueras. Además, no solo disfrutaréis de este fenómeno, sino de unas increíbles vistas del Madrid más castizo: la catedral de La Almudena, la a Casa de Campo (a sus espaldas) o la ribera del río Manzanares os acompañarán mientras alzáis la vista.
Azotea de la Cibeles
70 metros de altura con la calle Alcalá, el paseo de Recoletos o la diosa Cibeles como fondo para disfrutar de esta luna tan especial y de paso, podéis tomar algo para acompañar la noche. Es una opción más que apetecible…
Cerro del Tío Pío
Es uno de los mejores lugares que hay: tanto para dar la bienvenida a un nuevo día como para despedirlo por las vistas que ofrece. Con unas vistas más urbanas, pero no por ello menos bonitas. Podréis ver el Pirulí y las Cuatro Torres iluminadas por la luna más resplandeciente que hayáis visto nunca. Además, su ubicación es ideal, pues permite disfrutar de la noche sin el bullicio de la ciudad sin alejarse demasiado de ella.
Silla de Felipe II
Para nosotros es uno de los lugares más especiales desde el que disfrutar esta noche, porque no solo os encontraréis en plena naturaleza, sino que además tendréis unas increíbles vistas del pueblo y del monasterio de San Lorenzo de El Escorial. La luna y la Historia de España se abrirán paso ante vosotros. Eso sí, si decidís que este sea vuestro punto de encuentro, preparaos para llevar ropa de abrigo, porque de lo contrario os quedaréis helados… y no con las vistas.