¿En tu casa o en la mía?
¡Pero qué bien acaba una noche cuando nos hacen esta pregunta! O al menos eso es lo que debería pasar cuando te la hacen (la pregunta, eh): que acto seguido empieces a maquinar en qué rincón de tu casa vais a probar esta vez… ¡Pero no! Porque has tenido la mala suerte de compartir piso con la hermana sosa de Sor Citroen, que se encarga de avisar a vuestro casero cada vez que tienes visita. Y por la otra parte, más de lo mismo o incluso peor, porque tu media naranja vive con sus padres.
Si estuviéramos en el siglo pasado os diría que sois unos desvergonzados y que deberíais esperar a la noche de bodas, pero como yo estoy igual que vosotros, ¡qué os voy a contar! Como sé que es muy malo quedarse con las ganas, os ofrezco una alternativa mucho más atractiva que esperar a que vuestra casa quede libre: las love rooms Luxtal.
No disimuléis, porque con ese nombre seguro que sabéis lo que son: habitaciones por horas. Sí, sí, nada de ponerse colorados. Cuando yo vivía en mi pueblo, lo de coger el coche e irse a ese lugar que todo el mundo conoce (llamado descampado) era una buena opción. Pero en Madrid no me parece buena idea, ya que podría acabar protagonizando el próximo video viral o con una multa y la verdad es que no me apetece. Y aparte… ¡Ya no tengo edad!
Además, cuando veáis las habitaciones, cualquier otro nidito de amor se os va a quedar pequeño: las love rooms de Luxtal son elegantes y discretas. Todas cuentan con jacuzzi, espejos para hacer más interesante el encuentro, luces con diferentes tonos e intensidad para iluminar la velada a vuestro gusto y camas donde desplegar la imaginación…
No sé vosotros, pero yo me he vuelto muy exquisita y donde se pongan las burbujas y las luces tenues de la habitación, que se quite cualquier coche o a saber qué otro sitio. Las love rooms de Luxtal se olvidan de los complejos o los tabúes e invitan desde el primer momento a disfrutar en ellas.
Así que si queréis liberar estrés y endorfinas (las hormonas de la felicidad) lo único que os queda por hacer es decidir si sois más de la Habitación Classic o la Superior Aqua (con cama de agua), aunque también tienen algunas con sillón Tantra… ¡Por Dios! Espero que mi madre no me esté leyendo.
