Después de que corriera el pánico y se activara la alerta social tras imágenes como las que se veían en Cádiz la semana pasada en la previa del partido que podía darle el ascenso a la élite del fútbol español, Madrid ha querido extremar las precauciones de cara a evitar reproducir imágenes similares.
De este modo, Cíbeles, lugar habitual de celebración de títulos para los madridistas, fue acordonada por la policía. Doscientos policías nacionales y agentes municipales se concentraron en la zona para evitar que los aficionados se manifestaran con el propósito de celebrar la victoria liguera.
Los madridistas, según se pudo ver, obedecieron al club y a las autoridades y las celebraciones se produjeron en las casas y en los balcones. Y aquellas personas que se acercaron a saludar a la diosa frigia, lo hicieron en coche y dieron cuenta de ello, ya que los toques de claxon se sintieron hasta bien entrada la madrugada.
El Real Madrid ha celebrado la consecución de su trigesimocuarto título de liga, que obtuvo en la noche de ayer. El equipo de Zinedine Zidane ganó por dos goles a uno al Villarreal en el estadio Alfredo Di Stéfano, certificando así otro título más que irá directo a engrosar sus vitrinas.
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