Aún no nos hemos recuperado del cierre del Palentino hace poco más de tres meses y toca volver a decir adiós a otro mítico del barrio.
Una de las zonas que más ceses de negocio está sufriendo es la Corredera de San Pablo, que en cuestión de meses está pasando de ser una vía llena de bares con solera a una calle comercial más. Dónde las nuevas tiendas abren y cierran tan rápido que no te dará tiempo a conocer muchas de ellas.
La calle se ha despedido durante este año del Bar Prado y del Dominó y el último en cerrar ha sido el Farmacia de Guardia (situado en el número 49 de la calle). Los tres estaban acostumbrados a servir tanto a vecinos de toda la vida como a los más modernos. Del primero sabemos que se vendió, aunque no se sabe cuál será su siguiente vida. El destino del Farmacia de Guardia tampoco lo conocemos, ya que de momento no hay noticias de si se pondrá a la venta o se renovará.
En cualquiera de los casos, seguro que no pasa mucho tiempo hasta que vuelva a abrir sus puertas (sea de una forma u otra), ya que su ubicación es muy deseada al tratarse de una Zona de Protección Acústica Espacial, por lo que no se permite la concesión de nuevos permisos destinados a la hostelería.