Como tomando el relevo de Mercado 47, una iniciativa puesta en marcha por el Gobierno anterior, el nuevo equipo consistorial estimulará el uso de los 46 mercados de Madrid. Para ello se pretende modernizar y adaptar los mercados al siglo XXI.
Una de las iniciativas, quizás la más relevante y polémica, es la que aboga por la creación de una página web que permita la compra online. Al respecto, se ha pronunciado Javier Ollero, presidente de la Federación de Comercio Agrupado y Mercados de la Comunidad de Madrid, que en declaraciones a El Mundo ha dicho que: “No podemos perder el norte de oler, tocar, informarnos y conocer los alimentos”.
El miedo, entonces, de que la gente haga más compra online y menos in situ no estaría desapareciendo. Más bien al contrario. Por eso, otra de las ideas es virar el concepto de mercado: que dejen de ser lugares de paso y sus funciones se amplíen. Que sean puntos de encuentro. Para ello se pretende incrementar el número de puestos de hostelería, así como las actividades culturales.
El nuevo paradigma también está orientado a un mayor respeto medioambiental. Se pretende eliminar el uso de plásticos, cambiar las bombillas por LED e instalar puntos de carga para coches eléctricos en los aledaños.
A lo largo de los 21 distritos que hay en Madrid hay 46 mercados. 2.300 comerciantes. Muchos de ellos en decadencia. ¿La solución? Es difícil que alguien la sepa con claridad. Aun así, el plan estratégico de los Mercados municipales de Madrid –todavía sin financiación definida– es necesario para que no desaparezca una forma de consumo tan cercana.