El futuro del Metro de Madrid no pasa por recortar los tiempos de espera ni por vagones más modernos, sino por la eliminación de las tarjetas como mecanismo casi anticuado de acceso al suburbano.
Si primero fue la incorporación del abono transporte al teléfono móvil (que llegará este año), la voluntad de la Comunidad de Madrid es que ahora se pueda pagar directamente con tarjeta en los tornos. Y es algo que está relativamente cerca de convertirse en realidad.
La empresa pública de Metro ha publicado el contrato para añadir este servicio a los tornos modernos. Se trata de una funcionalidad que ya existe en otras ciudades como Nueva York y cuya licitación tiene un coste de casi siete millones de euros –y se financia con fondos europeos. La previsión es que pueda llegar a ser una realidad de aquí a dos años.
El sistema de pago bien puede recordar al que ya tienen incorporados los autobuses, que permiten pagar directamente bien con la tarjeta de crédito (si es contactless) o bien con smartphones que tengan este sistema de pago.
En declaraciones recogidas por el diario 20 Minutos, desde la Consejería de Transporte e Infraestructuras se asegura que «el objetivo es facilitar a los usuarios el acceso a Metro, eliminando la necesidad de tener que acudir a una máquina de venta de títulos de transporte».
Los tornos ultramodernos
Lo que comenzó en Gran Vía con la inauguración de la primera estación del futuro de la capital poco a poco se ha ido extendiendo por el resto de la red del suburbano madrileño.
Se trata de un plan de mejora tecnológica del metro, que afectará a un total de 137 estaciones, y que tal y como aprobó en enero el Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid comenzó con la instalación de tornos inteligentes en 32 nuevas estaciones.