La Comunidad de Madrid implantará a partir del próximo lunes 27 de enero un proyecto piloto para que mujeres y menores de edad puedan bajarse del autobús nocturno en aquellos lugares que les resulte más seguro, en lugar de en las paradas ya establecidas en cada itinerario.
Este proyecto se aplicará primero a los autobuses interurbanos que conectan la capital con otros municipios de la Comunidad como Fuenlabrada, Leganés, Parla, Pinto, Valdemoro y Las Rozas, con la idea de extenderlo posteriormente a otros municipios. Las líneas donde se realizarán las pruebas son la N-401, N-802, N-803, N-804, N-806 y N-903, que prestan servicio entre medianoche y las 6:00 h de la mañana.
El objetivo, según comunicó el consejero de Transportes, Movilidad e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, cuando se anunció esta iniciativa el pasado noviembre, es acortar la distancia de su recorrido desde el bus hasta llegar a casa, y así proporcionar más seguridad a estos usuarios.
En este sentido, el consejero defendió ante Europa Press la «discriminación positiva a favor de aquellos grupos de personas que están siendo objeto de un mayor número, desgraciadamente, de incidentes violentos», puntualizando que «son claramente mayores víctimas de la violencia las mujeres y también los niños, no los hombres».
«Solamente se requerirá que la persona lo solicite al conductor una parada antes de llegar a su destino; que se sitúe en la zona de la puerta delantera, porque descenderá por esta puerta, y que las paradas sean, lógicamente, en tramo urbano, para poder encontrar un sitio seguro para poder detener el vehículo», explicó Garrido.
Antes del comienzo del experimento, se han matizado dos condiciones: que la parada «a la carta» esté dentro del recorrido que sigue el autobús y que no se realice en glorietas, isletas, medianas, pasos a nivel, pasos para ciclistas, pasos de peatones ni en rebajes de aceras.
Este tipo de medida ya se ha implantado en ciudades como Bilbao, A Coruña, Vigo, Barcelona, Valencia, Granada, Sevilla y también empezó a funcionar en la provincia de Salamanca desde el pasado 25 de noviembre, Día Contra la Violencia Machista.
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