El Museo de Colecciones Reales existe desde hace 80 años, pero nadie lo ha visitado nunca. Y no porque haya estado envuelto en un manto de secretismo, precisamente. La verdadera razón es que ha transcurrido casi un siglo sin abrir sus puertas al público. La fecha de apertura estaba prevista para enero de 2020, pero se volvió a posponer la fecha y el museo abrirá a finales de 2022 en Madrid.
Será el más «real» de todos los museos, ya que albergará 800 piezas y obras de arte propiedad de la Monarquía española. Entre sus paredes se guardarán, como si de una caja fuerte se tratase, todos los tesoros de los que Reyes Católicos, Austrias y Borbones han hecho acopio desde la Edad Media.
No son pocas las joyas coleccionadas. Pinturas de Velázquez, Goya, Caravaggio y El Greco que adornaron las estancias de los palacios estarán a la vista de toda la ciudad. Tampoco faltarán artículos de otra índole, como una cómoda de Carlos III y el códice del Toisón de Oro, pero para conocerlos (y contemplarlos) solo podemos esperar a que el Museo de Colecciones Reales ponga fecha y hora a su inauguración.
De cascarón vacío a ambicioso eje cultural
La historia del Museo de Colecciones Reales, si es que un museo que jamás ha expuesto nada puede tener historia, está marcada por las interrupciones.
La idea se perfiló por primera vez en 1935, pero muy pronto quedó truncada por el estallido de la Guerra Civil. El proyecto se retomó entre 1950 y 1980: treinta años que, a la vista está, no dieron ningún fruto. Patrimonio Nacional asumió el mando en 1998 y, por fin, las obras para la construcción del museo dieron comienzo en el año 2006. El emplazamiento se ubicó en los jardines del Campo del Moro, pegado a la Catedral de la Almudena y al Palacio Real. Tras el hallazgo de algunos restos arqueológicos y un aumento de la partida presupuestaria, los últimos retoques se ejecutaron en 2015 y ahí quedó la cosa.
Estaba previsto que el Museo de Colecciones Reales empezase a funcionar en enero de 2020 pero se volvió a posponer su apertura, la nueva fecha estimada será a finales de 2022. El Patrimonio Nacional tiene un ambicioso plan para estas instalaciones: vertebrar un gran eje cultural y de ocio conectando los Jardines de Sabatini, la plaza de la Armería, el Campo del Moro y Madrid Río.
Se considera que el Museo de Colecciones Reales sería un estímulo más para convertir el nuevo conjunto en el segundo polo de atracción de Madrid después del eje Prado-Recoletos.
Para asegurar aún más el atractivo de la zona, la cabeza de Patrimonio Nacional cuenta con abrir el túnel de Bonaparte, el pasadizo secreto que une el Palacio Real y la Casa de Campo.
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