Las obras, a veces y especialmente en Madrid, pasan a integrar el estado urbano y emocional de una ciudad. Bien lo sabemos los madrileños, acostumbrados ya a las retroexcavadoras y grúas y vallas de la estación de Gran Vía. Y a los andamios casi permanentemente instalados en tantas otras zonas. Es el caso parcial de las obras de un edificio de la plaza Mayor: La Casa de la Panadería, terminadas tras nueve meses.
Los trabajos acometidos se han centrado en restaurar sus balcones y sus barandillas y en unificar el color de la carpintería exterior. De este modo, se ha mejorado el aislamiento acústico y térmico del edificio y ahora se puede disfrutar de la fachada del edificio. Una fachada compuesta por murales alusivos a la historia y las tradicones de Madrid.
El edificio alberga el centro de turismo del Ayuntamiento de Madrid, está considerado Bien de Interés Cultural y las propias obras empezaron en junio de 2020 y se retrasaron más de la cuenta debido a las inclemencias derivadas de Filomena.