También han sufrido cierres el parque del Capricho y La Rosaleda del parque del Oeste.
El parque de El Retiro seguirá cerrado, al menos, hasta este viernes. El Ayuntamiento informó ayer su decisión de prolongar el cierre del recinto, decretado el pasado 24 de marzo tras la muerte de un niño de cuatro años al caerle un pino.
El Gobierno municipal señaló que «las intensas lluvias y las rachas de fuertes vientos que han venido produciéndose en Madrid desde que se inició el mes de marzo» son responsables de la caída de ramas y árboles y «han debilitado muchos de los ejemplares situados en los parques y zonas verdes de la ciudad», por lo que se planea extender las labores de inspección del arbolado para evitar futuros riesgos.
También el parque del Capricho ha estado cerrado este fin de semana y lo estará hasta el sábado 7, ya que solo abre los fines de semana. También La Rosaleda del parque del Oeste permanecerá cerrada hasta este miércoles 4 de abril por trabajos de retirada de árboles dañados por las lluvias y el viento.
Tras el trágico incidente del 24 de marzo, la oposición pidió al equipo de Ahora Madrid que se modificara el protocolo, de manera que se obligue al cierre del recinto ante condiciones meteorológicas tan adversas como las del día en que fue cerrado.
El protocolo vigente establecía para ese día la alerta amarilla y el parque abrió con las recomendaciones de la alerta naranja, que implicaba cerrar algunas zonas y balizar otras, pero no cerrar el parque, que sería una medida propia de la alerta roja. Inés Sabanés, delegada de Medio Ambiente y Movilidad, explicó que están reuniéndose con técnicos y profesionales, y señaló que «un protocolo más duro implica cierres más frecuentes del parque y un uso más restrictivo del mismo. No estamos cerrados a ello, estamos escuchando propuestas».