El espectáculo podrá verse en febrero en los Teatros de Canal.
Los límites que reconocen a unos marginan a otros. Esta dinámica, que se reproduce constantemente en infinidad de ámbitos del espectro social, se aprecia a la perfección en mundos tradicionalmente tan encorsetados como el del flamenco, donde la mujer estuvo siempre vinculada al baile, a lo voluptuoso, a la exhibición de lo físico, mientras que el hombre se centraba en el cante.
En casa quizá cantasen y bailaran unas con otros, pero en lo profesional, la línea estaba bien delimitada y era difícil cruzarla. En cierto modo, de esto trata la última creación del bailaor y coreógrafo Manuel Lián, Premio Nacional de Danza en el 2o17.
Su nuevo espectáculo, ¡Viva!, que podrá disfrutarse los días 8, 9 y 10 de febrero en los Teatros de Canal, trata de reconcepctualizar lo masculino y lo femenino, resaltando la presencia histórica de lo segundo.
Y paradójicamente, para defender la imagen de ellas se ha usado a seis bailaores, bailaores con mantón y bata de cola, que se encargarán de romper los límites de género, combatiendo aquella vieja idea de que donde acaba lo de ellas empieza lo que nos concierne a nosotros.