Los paseantes neoyorquinos han podido averiguar o concluir estas semanas que, si la vida fuera una ciudad, sería Madrid. Dicho informativamente: se han encontrado con unas marquesinas o mupis (soportes urbanos con publicidad) con un mensaje derivado de la campaña de promoción turística de la ciudad: “If life were a city, it’d be Madrid”.
La campaña, lanzada a inicios de verano, aspira a promover la imagen de la capital: a transmitir la energía de la ciudad y de la gente que la hace cálida. Un conjunto de acciones cuya expansión es mundial y si bien es cierto que las acciones de Nueva York son las más llamativas, estos carteles también han llegado a Boston, Chicago, Miami, Ciudad de México, Monterrey o Bogotá.
Madrid ha puesto el acento sobre el público estadounidense: y es que el estadounidense era en tiempos prepandémicos el turista que más visitó la ciudad. En 2019, según el Instituto Nacional de Estadística, vinieron a Madrid 809.000 estadounidenses.
El periódico ABC informa que hay 315 mupis con la imagen de Madrid y que se distribuyen por Brooklyn y Manhattan. Los anuncios permanecerán en la ciudad durante dos semanas y el contenido de cada uno de ellos es un spot de ocho segundos. La promoción turística de la ciudad también llega a los medios de comunicación y revistas como The New Yorker dan soporte a estas creatividades.
La campaña
El texto completo al que alude esta campaña es el siguiente: “Siempre se repite la misma escena: llegas a Madrid y piensas «¡qué ambiente!» Hay algo en el aire, una energía que te activa y te llena de sensaciones positivas. Quizás sea el sol, o la calidez de su gente, pero inmediatamente te apetece recorrerla. Un simple paseo te mostrará que aquí se vive intensamente y se disfruta. Que la vida es celebrada en la calle, en sus terrazas y en sus mercados. En sus verbenas de verano. Ves a la gente reír en los parques y quieres sumarte a la fiesta. ¿Qué es lo que tiene? Si la vida fuera una ciudad, sería Madrid”.
En junio de este año se lanzó un vídeo de cuidada estética que habla de diez planes que hacer en Madrid. En el vídeo se bromea sobre el hecho de que sean pocos y al final surgen decenas de ellos: visitar El Prado, e Reina Sofía, comer caramelos de violeta, visitar musicales, probar un cocido madrileño o hacerse selfies en la plaza Mayor o en la puerta del Sol.