La plaza de Pedro Zerolo iba a experimentar un cambio de imagen radical que finalmente no va a producirse. El Ayuntamiento había aprobado en la anterior legislatura plantar seis praderas en pleno barrio de Chueca, pero el nuevo gobierno municipal no va a continuar con el proyecto.
La idea original consistía en convertir la plaza en un espacio verde con árboles y césped, más parecida a un parque que a una zona urbana. El arquitecto había planificado una zona para el descanso en el centro de la ciudad que no todo el mundo vio con buenos ojos.
La Asociación de Vecinos de Chueca (AVChueca) mostró su negativa al proyecto desde el principio ante el miedo de que la plaza de Pedro Zerolo se transformase en un lugar propicio para el «botellón y el vandalismo». La Asociación se quejaba también de los altos costes y la escasa accesibilidad de las instalaciones que iban a construirse.
La Junta Municipal de Centro ya había previsto reuniones para revisar el proyecto con los habitantes de la zona. Ahora el área de Obras y Equipamientos del Ayuntamiento de Madrid ha paralizado las obras y consensuará un nuevo modelo con los vecinos de Chueca el próximo año.