Comprar cosas que no necesitas solo porque son baratas. No es una máxima necesariamente propia de los tiempos de ahora (hay mucha gente lleva años yendo al Rastro con ese propósito), pero sí que se ha intensificado con fenómenos como el Black Friday o espacios como Crazy Day Factory (calle del Trueno, 28 en Leganés).
En Madrid se han multiplicado los Outlets en los últimos años (prueba de ello es la tienda de Bimbo que tiene todo rebajado a mitad de precio o el supermercado Action). Y este sitio es solo una prueba más de lo bien que funcionan este tipo de negocios.
El mecanismo de Crazy Day Factory es sustancialmente diferente al de otros outlets de características similares ya que cambia sus precios a diario.
¿Cómo funcionan los precios de Crazy Day Factory?
El viernes renueva el stock de toda la tienda y fija el precio de los productos en 15€, el sábado lo rebaja a 12€, el domingo a 10€, el lunes a 8€, el martes a 5€, el miércoles a 3€ y el jueves a 1€.
Atendiendo a los comentarios de los seguidores en Instagram (111.000) podría pensarse que es un modelo de negocio que recuerda a la forma de alimentación de la película El hoyo (Galder Gaztelu-Urrutia, 2019) en la que quienes habitan las primeras plantas comen más y mejor que los de las últimas (a quienes les llegan las sobras).
Las colas, sin embargo, no son exclusivas de los jueves (el día en el que es más barato comprar en la tienda) sino que los viernes se arremolinan desde primera hora centenares de personas a las puertas del local.
¿Y qué se vende en Crazy Day Factory?
Liquidaciones de Amazon, según informan en la descripción de su Instagram. En menos de un mes (se inauguró el 10 de febrero), Crazy Day Factory ha demostrado vender productos de todo tipo: de hogar, de electrónica, de cocina o juguetes.
Algunos de los ejemplos que se pueden ver en sus redes sociales son medidores de glucosa, linternas para la bici, correctores de posición o archivadores (el día en que los enseñan están todos a 3€).
Ahora bien, la tienda no permite devoluciones, aunque sí que tiene una zona de prueba en la que se testean los productos.