El Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón ha abierto una guardería y un hospital. La noticia sería de impacto moderado o no sorprendería si no fuera porque a ambos sustantivos le falta un complemento: de plantas.
La localidad madrileña, atendiendo a las dificultades de cada quien para cuidar sus plantas cuando se va de vacaciones, ha abierto lo que los vecinos de Pozuelo conocen como un balneario para plantas.
Cada miércoles los vecinos tienen la posibilidad de depositar sus plantas en el balneario y de dejarlas al cuidado de expertos y de voluntarios. Es especialmente curioso lo de los expertos: hay un fitopatólogo (estudioso de las enfermedades de las plantas) que vigila tus plantas.
Cuando el estado de la planta no es el óptimo pasa de la guardería a la UVI. En palabras a Europa Press, uno de los voluntarios del proyecto, Bernardino Rodríguez, ha dicho lo siguiente: “Si los problemas no son graves, se le informa cuál es el tratamiento para seguir y el vecino se lleva su planta. Si la planta está muy enferma, la dejamos hospitalizada en la zona de UVI para plantas en recuperación”.
El acceso a este servicio solo está disponible para quienes están empadronados o empadronadas en Pozuelo de Alarcón. Y soluciona un problema para quien tiene en sus plantas un elemento de cuidado a la altura del de los animales: el calor no las castiga (tanto) y las vacaciones se pueden tomar sin preocupaciones (tantas).