Mientras algunos de los edificios más representativos de Europa (el Coliseo romano o la Puerta de Brandenburgo berlinesa) se apagaban por completo hace unos días, Madrid vivía ayer la primera jornada de la entrada en vigor del Real Decreto de ahorro energético.
Algunos de los edificios simbólicos de la región mantenían sus luces encendidas. La justificación la dio Enrique Ossorio, vicepresidente regional, en una visita al Instituto Madrileño de Estudios Avanzados- IMDEA Energía. Ossorio indicó que los monumentos no están incluidos en estas medidas.
La consecuencia de las palabras de Ossorio se traduce en que los 25 espacios de titularidad autonómica con categoría de monumento no están afectados por el decreto energético. Algunos ejemplos de este tipo de edificios son el Instituto Cardenal Cisneros, el Palacio Bauer, la Real Casa de Correos o la Facultad de Filosofía y Letras. Los edificios reconocidos como Bien de Interés Cultural no necesariamente se ven afectados por el Real Decreto.
¿Qué edificios sí se apagaron?
El Teatro Real empezó a apagar su iluminación el lunes, pero con una condición: solo se apaga durante los días que no hay funciones. Así lo confirmó la directora de Infraestructuras y Servicios Generales de la institución, Nuria Gallego, a Europa Press.
Otro edificio simbólico de Madrid que sí apaga sus luces es el Palacio Real –y todos los que dependen de Patrimonio Nacional como es el Palacio de Aranjuez o el Real Monasterio del Escorial.
El edificio que está enfrente del Palacio Real, la Catedral de la Almudena, también apaga sus luces. La Almudena depende del Ayuntamiento de Madrid. Enrique López, consejero de Presidencia, Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid, anunció el miércoles que cumplirán y apagarán todos los edificios oficiales.
Hay otro tipo de monumento o estatua de titularidad pública que también se apagó durante la jornada de ayer: el que preside las glorietas. Y es algo que se pudo ver, por ejemplo, en la plaza del Emperador Carlos V (la de Atocha).
¿Para qué sirve el decreto energético?
La función del llamado decreto energético es la de limitar el uso energético ante una inflación fuera de control. Es una petición expresa de Bruselas: que los países miembros redujesen voluntariamente su consumo de gas un 15%. En el caso de España, la reducción es del 7%.
El porqué de esta reducción la cita el Diario Oficial de la Unión Europea al señalar como origen la agresión militar de la Federación de Rusia a Ucrania y aludir a que «Los flujos globales de gas procedentes de Rusia son actualmente inferiores al 30% de la media de los flujos de gas en el periodo 2016-2021»