Un corte sin vistas a finalizar del que Metro de Madrid no se hace responsable trae de cabeza a los madrileños.
La última semana de enero ha arrancado movidita, si se nos perdona que hablemos de movimiento cuando el transporte está más bien paralizado.
La red suburbana anunció el viernes pasado un corte en la línea 2 que afectaba al tramo entre Sol y Retiro: cuatro paradas bloqueadas sin razón aparente, contando con Sevilla, que lleva meses cerrada por las obras faraónicas que se están acometiendo en la plaza de Canalejas.
Circulación interrumpida en L2 entre Retiro y Sol, en ambos sentidos, por incidencia en la infraestructura por causas ajenas a Metro.
— Metro de Madrid (@metro_madrid) 25 de enero de 2019
Parece que por ahí van los tiros, precisamente: se especula con que han sido estos trabajos los que han interferido con el funcionamiento normal del metropolitano, según informa EuropaPress, pero lo cierto es que Metro de Madrid solo ha sido claro al declarar que el corte se debe a «causas ajenas» a su red.
Las dudas no se quedan en los motivos que han dado lugar a la incidencia, sino que tampoco se sabe cuánto va a durar el corte en la línea 2. De momento, hemos pasado todo el fin de semana sin poder acceder a este tramo, y la única información ofrecida al respecto es que seguirá cerrado durante «los próximos días».
El corte en la red ha obstaculizado aún más el transporte madrileño, que está sufriendo las consecuencias de una huelga indefinida de taxis que ya lleva siete días en marcha.
El martes 29 de enero, Metro de Madrid ha puesto en marcha un autobús S.E. (Servicio Especial) que circula entre Sol y Retiro.
Foto de portada: TeaMeister