
Las obras de la Puerta del Sol todavía no han terminado, pero el aspecto que luce ya se parece bastante al que proyectaron los arquitectos en los renders. A falta de la modificación de la ballena, se puede decir que la obra ya está acabada.
Y ayer se estrenó uno de los elementos capitales en la definición de una reforma que ha consistido en gran medida en el cambio de ubicación de sus elementos, la peatonalización de la totalidad de la plaza y el cambio de materiales.
La nueva fuente y Carlos III
Ese elemento del que hablamos es la inauguración de una nueva fuente (la única de la plaza, por otro lado) que rodea a la estatua ecuestre de Carlos III, conocido como el alcalde de Madrid.
Carlos III también cambió su ubicación (igual que la de la Mariblanca) a un lugar más preponderante. Ese cambio que le llevó a presidir la plaza tuvo lugar hace unos meses y fue entonces cuando el Ayuntamiento se refirió al cambio en los siguientes términos: “tiene un carácter singular acorde con la calidad monumental del entorno y cuyo fondo, de piedra color gris oscuro y con gran número de puntos de luz de diferentes tamaños, emulara a un cielo estrellado”.
La pequeña fuente que rodea la estatua ecuestre la conforman principalmente un juego de chorros, así como una iluminación nocturna que dibuja, como señalaba el consistorio, las estrellas del cielo de Madrid. Todo ello para dotar de más importancia a una escultura que pesa 70 toneladas.