La buena noticia en términos ecológicos de la vuelta del lobo a Madrid choca con los intereses del sector, preocupado por sus pérdidas.
Cazar al lobo en la sierra madrileña podría ser algo legal. La organización agraria UPA (Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos) ha puesto sobre la mesa del gobierno autonómico una propuesta con el objetivo de incrementar la protección del ganado en la sierra de Madrid.
Según declaró Jesús Anchuelo, secretario general de UPA, al diario 20 Minutos, la primera opción defendida por los ganaderos no es matar al lobo. Reclaman que es necesario la instalación vallados y la presencia de perros. Si estas medidas fallaran, defienden que los ganaderos tuvieran la potestad de poseer un arma para poder ahuyentar al animal con tiros al aire. Y si esto último ya no sirviera, poder darle caza.
El gobierno regional de Ángel Garrido aún no se ha pronunciado sobre un problema que parece incrementarse con el consecuente quebradero de cabeza de los ganaderos pese a la buena noticia en términos ecológicos que la vuelta del lobo supone.
La caza del lobo al sur del río Duero está totalmente prohibida con multas de hasta 200.000 euros, siendo la norma al norte del río algo más flexible como mecanismo de control cinegético. Sin embargo, la presión de los ganaderos crece al igual que crecen las medidas compensatorias por daños. La Comunidad de Madrid contempla el pago de entre 60 y 1.200 euros por animal herido (que también abarca los daños ocasionados por buitres y perros asilvestrados), pero un par de sentencias abrieron la veda a indemnizaciones de hasta 25.000 euros.
La decisión a tomar no es fácil y algunos sectores entienden el problema pero discuten que la libre disponibilidad de armas por parte de los ganaderos sentaría un precedente, el de la justicia a gusto de cada cual.