Además de por el cocido y por lo bien que nos ponen las cañas, Madrid lleva camino de convertirse en la ciudad de los centros comerciales. Después de la reciente y fulgurante inauguración de X-Madrid, de la noticia de la apertura de Open Sky o de la mera existencia de otros super centros comerciales como Xanadú, llega a la ciudad Madrid Fashion District.
Los motivos que elevarían a Madrid Fashion District a la vanguardia de los centros comerciales están vinculados con los decorativos. El interior y el exterior del centro comercial, diseñado por el interiorista Lázaro Rosa-Violán, están inspirado en la esencia local. Bebe del espíritu de los barrios más populares de la capital.
Tanto es así, que Madrid F.D tendrá ocho zonas diferenciadas: Puerta de Alcalá (la entrada); Gran Vía (el área comercial); Serrano (donde estarán las marcas prémium); Callao (desfiles, conciertos o retransmisiones en directo); Malasaña (vanguardia); Atocha (la estación de tren); Sol (jardín, estanque y tirolinas); Retiro (un estanque que será invernadero y galería de arte).
Más que un centro comercial, se prevé hacer de Madrid F.D un centro de moda, gastronomía, arte y ocio —esos son los pivotes alrededor de los que gira el concepto. Y para ello también se intentará convertir el hecho de ir en una experiencia. Para ello se pondrán en marcha servicios personalizados, proliferarán las pop-ups y se crearán zonas gastronómicas diferenciadas y reconocibles.
Las zonas gastronómicas serán MAD-Bites (con pequeños puestos diseminados por el edificio); MAD-Local (una calle con establecimientos centenarios); MAD-Table (cuatro grandes restaurantes: estadounidense, italiano, asiático y healthy); MAD-Station (en el sótano, platos multiculturales).
La apertura está prevista para finales de 2020 y la ubicación será la del anterior centro comercial de Arroyosur.