Amooor, amooor, amooor, nació de ti, nació de mí, ¡de Madrid! Sí, sí, de Madrid. No se nos ha ido la pinza, simplemente nos hemos dado cuenta de que enamorarse de alguien de Madrid es mucho mejor de lo que tú creías. Si encontrar tu media naranja ya hace que hasta tu piel se vea mejor, imagina si esa otra mitad tiene sangre chulapa corriendo por sus venas. Nosotros te contamos porqué tener pareja en Madrid (y de Madrid) puede ser maravilloso:
- Porque siempre te defenderá: algunos lo llamarán chulería, pero nosotros lo llamamos valentía o caballería. Y ¡ojo! qué no se da sólo en el sector masculino. Un/a madrileñ@ te defenderá a capa y espada allá donde vaya. Tú serás su tesoro más preciado de tu pareja en Madrid.
- Endulzarás tu vida: churros con chocolate, caramelos de La Pajarita, planchas de hojaldre, barquillos, tejas… Y así podría seguir hasta aumentar tantos kilos que ni el chándal más ancho que tengas te quedaría bien. Si tu pareja es un auténtico gato tendrás la suerte de que su abuela te prepare platos caseros. ¡Nada de bollería industrial! Amorosa y cariñosa repostería madrileña.
- …Y culturizarás tu mente: en el fondo, el tópico de que el madrileño es un poco chulo tiene algo de verdad, pero en este caso te vendrá bien, ya que querrá presumir de ciudad y enseñarte cada rincón: museos, curiosidades y un montón de anécdotas que te convertirán en todo un sabelotodo de la capital de España.
- Darás la vuelta al mundo… plato a plato: el amor se vive mejor con el estómago lleno y en Madrid lo podéis llenar con platos asiáticos, indios, franceses, etíopes, venezolanos… y un largo etcétera. Quizá no tengáis dinero para recorrer el mundo, pero al menos tu pareja te demostrará lo detallista que puede llegar a ser.
- Descubrirás lo sexy que puede ser un traje regional y hasta el chotis te parecerá una danza de cortejo. Nunca volverás a ver la ver La verbena de la Paloma con los mismos ojos.
- Vuelos lowcost: podéis pensar que soy una oportunista, pero… ¡Qué carajo! Si tenéis la suerte de enamoraros de un/a madrileñ@s recuerdo que desde la capital siempre salen vuelos baratísimos a un montón de destinos, así que siempre podréis sorprenderle sin que eso suponga perder un ojo de la cara.
- El metro no tendrá ningún secreto para ti: no necesitarás ningún mapa ni aplicación y ni mucho menos preguntar a alguien cómo se va a tu destino. Los transbordos no guardarán ningún secreto para ti.