En noviembre de 2017, el Lago de Casa de Campo comenzó sus obras de mejora y el mismo mes de este año, volverá a llenarse.
Los trabajos realizados fueron más que necesarios, ya que durante nuestra entrevista a Elena de la Paz, directora encargada de las obras de dicho lugar, descubrimos que había algo más que peces en las profundidades de sus aguas.
Tras su vaciado, se encontraron cosas más comunes, como móviles o juguetes de niño y otras que nadie se habría esperado, como torres de ordenador, más de 20 tapas de sartenes atadas a un contrapeso, una pistola y alguna que otra bala y huesos enormes.
La remodelación final del estanque estaba prevista para el pasado mes de julio, pero se retrasó debido a las lluvias que ha habido durante este año. Sin embargo, ya parece haber una fecha para que el lago de Casa de Campo vuelva a llenarse. El próximo mes de noviembre, el Ayuntamiento de Madrid pondrá fin a las obras de la zona.
Han pasado más de 20 años desde que se vació por última vez y, desde entonces, su deterioro ha ido aumentando de manera considerable. De hecho, para ser más exactos, estas obras de mejora han supuesto la primera reforma integral de la zona, ya que la última vez que se vació (entre 1995 y 1997), se hizo tan solo para su limpieza.
Aún así, las opiniones sobre si era necesaria o no esta acción, son de lo más opuestas. Los hosteleros de la zona estiman que durante todo el tiempo en el que el lago no ha estado operativo, han sufrido pérdidas de hasta un 70% de clientes respecto a 2017, pero el Consistorio hace hincapié en que la demora se debe a las condiciones meteorológicas que hemos vivido durante este año. «Según la AEMET, enero fue húmeod, febrero muy húmedo, marzo extremadamente húmedo y abril muy húmedo. Por este motivo, se ha tramitado una ampliación del contrato de tres meses y está previsto que las oras finalicen en noviembre».