En la calle Serrano ha florecido un restaurante asturiano alejado de la media. Se llama Chigre, y con su nombre hace honor a las auténticas tascas del norte, aquellas donde la sidra riega el suelo y los platos salen rebosantes de la cocina. Eso sí, su pinta no podría ser más chic y cosmopolita, así que no desentona para nada con el barrio.
Chigre ha capturado la esencia asturiana para fusionarla con un ambiente cool, una doble sorpresa que te conquista primero por los ojos y por el estómago después.
La tradición y la sencillez asturianas están plasmadas en una carta sin delirios de grandeza que apuesta por la calidad. Jamás faltan sobre la mesa una fabada con su compango ni un cachopo cocinado a la perfección, aunque también hay propuestas más juguetonas, como el huevo de corral con boletus y crema de patata, que agradan a los paladares con preferencia por la vanguardia.
En la tasca cool hay dos espacios separados para dos experiencias diferentes: la primera es la zona de barra, donde la sucesión de cañas (buena selección, por cierto) lleva a la necesidad insuperable de pedir unas tapas. Imprescindibles las croquetas de jamón y los fritos de pixín.
Al fondo, la sala está concebida para acomodarse en una comida reposada, de las de sobremesa con licor y postre (¡que nadie se vaya sin rebañar a fondo el arroz con leche!).
Chigre hace que la capital tenga sabor a Asturias. ¡Y qué buena está así!
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📍 Calle Serrano, 45 (Barrio de Salamanca)
🕒 De 8:00 a 16:30 h y 20:30 a 23:30 h. Domingos cerrado. Lunes, martes y miércoles cerrado por las noches.
💸 20€ en barra y 40€ en el restaurante.
📱 Más información en su web oficial e Instagram.