La segunda calle más transitada de Europa incorporará a su catálogo comercial un nuevo negocio. A todo ese inconfundible y variable reguero de hamburgueserías afamadas, marcas de ropa presentes internacionalmente o tiendas multimarca se le sumará La mafia se sienta a la mesa.
El restaurante italiano de polémico nombre ocupará el espacio que hasta 2005 ocupó el Cine Rex. La planta baja y la primera planta del número 43 de Gran Vía será dentro de poco un restaurante.
¿Cómo será el nuevo restaurante?
El Cine Rex, que es obra de Luis Gutiérrez Soto (arquitecto referente en Madrid) y que funcionó durante 60 años, es un icono del Madrid de la segunda mitad del siglo XX. Ahora albergará 360 metros de restaurante con aforo para 120 personas.
El interiorismo del local replicará a nivel estético un mix de arquitectura clásica italiana y art decó. Tendrá, asimismo, diez grades ventanales que ofrecerán vistas a la Gran Vía.
Haciendo gala de una fachada acristalada, el local tendrá dos salas privadas y una de ellas será una reinterpretación del Bar Vitelli, el negocio en el que se graba la escena de El Padrino en la que Michael Corleone le pide la mano a su mujer Apollonia.
De un negocio que era un cine a un negocio que ya no lo es, pero que replica parte mínima de su esencia.