Es tentador pensar que pocas de las personas que lean este artículo llegarán vivas hasta 2100. Por eso es divertido plantearse cómo será el mundo –cómo será Madrid– dentro de ocho décadas. La proyección imaginativa involuntariamente remite a un universo futurista del que la IA no se escapa en la pregunta gráfica y casi plantea un Madrid a medio camino entre Blade Runner y Futurama. En lo textual, sin embargo, es mucho más prudente.
Es curiosa esta divergencia de criterios –imaginativo en lo gráfico y prudente en lo textual. Como si lo gráfico aceptara mucha más ficción y abstracción que lo escrito. La IA textual que hemos consultado es la ya famosa chat.openai. Y la respuesta varía poco o casi nada en función de los años que le preguntes. Lo que no quita que no se pueda extraer una sobria conclusión: hay cuatro factores que definirán el futuro de las grandes ciudades en los próximos años.
Para la parte gráfica, por cierto, hemos usado Midjourney, que recrea imágenes a partir de descripciones detalladas.
La opinión de la Inteligencia Artificial
El del cambio climático es el más determinante y es el primero. La previsión en Madrid es que alcance las temperaturas de Marrakech de cara a 2050. El verano será difícilmente soportable. Los otros tres factores son la urbanización (en 2100 Madrid Nuevo Norte tendrá la antigüedad que ahora puede tener la Colonia de San Cristóbal), los cambios demográficos y las nuevas tecnologías. Todos, realmente, bastante impersonales y poco adaptados a Madrid. La respuesta completa es la siguiente:
«Es difícil predecir con certeza cómo será Madrid en 2100, ya que depende de muchos factores que pueden cambiar con el tiempo. Algunas posibles tendencias que podrían afectar a Madrid en el futuro incluyen:
- Cambios climáticos: Madrid podría experimentar un aumento de la temperatura y una mayor frecuencia de fenómenos meteorológicos extremos, como olas de calor o sequías. Esto podría afectar a la vida cotidiana de la ciudad y a la economía local.
- Urbanización: Madrid podría seguir creciendo y urbanizándose, con la construcción de nuevas viviendas y servicios. Esto podría llevar a una mayor demanda de energía y transporte, así como a una mayor presión sobre el medio ambiente y el suelo disponible.
- Cambios demográficos: Madrid podría experimentar cambios en su población, como un envejecimiento de la población o un aumento de la inmigración. Esto podría tener implicaciones para la economía local y el mercado laboral.
- Nuevas tecnologías: Las nuevas tecnologías podrían tener un impacto significativo en la vida cotidiana de Madrid en el futuro. Por ejemplo, podrían mejorar la eficiencia del transporte o la calidad de vida de la gente.
En resumen, es difícil predecir cómo será Madrid en 2100 con certeza, pero es probable que experimente cambios significativos debido a factores como el cambio climático, la urbanización, los cambios demográficos y las nuevas tecnologías».