Ya es oficial: el caloret llegará a Madrid el próximo febrero. Según ha anunciado María José Catalá, alcaldesa de Valencia, el fin de semana del 17 y 18 de febrero Madrid celebrará su propia mascletá, una semana antes de la Crida que da el pistoletazo de salida a las fallas valencianas. La ubicación todavía se debate por un comité de expertos, pero se baraja la opción de celebrarla en la plaza Cibeles o la de Colón.
Durante ese fin de semana, los habitantes de la capital podrán disfrutar no solo del disparo típico, si no también de la passejà de las falleras mayores, que se pasearán con sus míticos vestidos por las calles madrileñas acompañadas por sus cortes de honor.
Será toda una celebración para estrechar lazos entre las dos comunidades autónomas, como ha declarado la alcaldesa valenciana, que anima a los madrileños a los que les haya gustado el espectáculo a que sigan la fiesta en Valencia, ya que “tienen 19 días en marzo para poder seguir disfrutando de ese espectáculo pirotécnico en el que somos únicos en el mundo”.
Ahora bien, llevar a cabo el disparo no es cosa menor, por lo que esta semana se ha desplazado a Madrid una delegación formada por pirotécnicos, bomberos, policías locales y técnicos de prevención de incendios que velarán por la seguridad de todos los madrileños en este día tan marcado.
Pero, ¿por qué en Madrid?
El porqué de esta decisión tiene su origen en una promesa que el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, le hizo a María José Catalá este marzo. Durante su visita a las Fallas, Almeida hizo saber a la ya actual alcaldesa que si ambos ganaban las elecciones del 28 de mayo habría una mascletá también en Madrid.
Y dicho y hecho, la fiesta más valenciana llegará a la ciudad el próximo 2024 con el objetivo, según Catalá, de “hacer más internacional todavía nuestras fallas y de llevar a otro punto de España una actividad muy nuestra».