Podría ser que una persona condujera un coche, pasara por la esquina noreste del Retiro, viese una montaña vallada y no se sorprendiera: esa es la imagen con la que ha convivido toda su vida. Esta anécdota apócrifa ejemplifica el olvido histórico al que ha estado sometido la Montaña Artificial del Buen Retiro, también conocida como la Montaña de los Gatos –por la presencia de gatos silvestres o porque la gente abandonaba sus gatos en los alrededores.
La Montaña de los Gatos no se puede visitar desde hace 20 años –cuando tuvo lugar una última exposición en el interior de la montaña–, pero después de que el Ayuntamiento de Madrid diese luz verde en mayo a la recuperación de este simbólico y artificial monumento, el delegado del Área de Movilidad y Medio Ambiente, Borja Carabante, ha anunciado que las obras comenzarán la segunda quincena de octubre.
Esta colina, situada en un parque que es Patrimonio de la Humanidad., se someterá a unas obras que remodelarán tanto el interior como el exterior. En términos del Consistorio madrileño, la reforma exterior «busca recuperar estructura, caminos y recorridos originales, manteniendo la zona superior de observación y las cascadas», mientras que la interior volverá a acoger exposiciones permanentes sobre la historia del Parque de El Retiro.
La historia y los problemas de la Montaña de los Gatos
La pequeña colina fue construida en 1817 por orden y capricho del monarca Fernando VII. Su forma es particularmente reconocible por los senderos ajardinados que la cubren, así como por las tres cascadas artificiales que abrazan a la propia montaña.
El agua (que se filtra en el interior de la instalación) es precisamente uno de los motivos por los que no se ha podido acceder durante los últimos 20 años. Así, en esta reforma también se renovará la iluminación y el sistema de riego. Las obras, inicialmente previstas para septiembre de 2022, comenzarán la primera quincena de octubre y se ejecutarán en siete meses.
El presupuesto aprobado del proyecto que recuperará este monumento del siglo XIX es de más 2,6 millones de euros. Previsiblemente, la Montaña de los Gatos sería visitable para mayo de 2023.
Según ha señalado el Ayuntamiento de Madrid en una nota informativa, «la remodelación se adecuará respetando la edificación original, que fue construida para ser cubierta con tierra y vegetación creando una montaña artificial formada por una cúpula de 14 metros de diámetro, un óculo superior y cuatro galerías interiores abovedadas».
La Montaña Artificial está en claro deterioro y lleva dos décadas cerrada por la falta de seguridad. La última vez que la intervino en el Ayuntamiento fue en 2004 para vallarla y en 2018 pretendió renovar la estructura. El entonces Ayuntamiento liderado por Manuela Carmena convocó un concurso público con la intención de rehabilitar el espacio, pero el concurso quedó desierto.