Es uno de los puntos de encuentro por excelencia del barrio del Pilar y lo ha sido durante los últimos 40 años: el centro comercial La Vaguada, construido en 1983, fue el primero que hubo en Madrid y en el año en que cumple su 40 aniversario será objeto de una reforma protagonizada por «grandes lucernarios, elementos naturales y por sus icónicas velas«, según informa una nota de prensa sobre el proyecto.
El despacho de arquitectura L35 será el encargado de renovar la estética de La Vaguada y adaptar el centro comercial a los estándares de eficiencia y sostenibilidad, guiándose por las mismas directrices por las que se guió para su construcción el canario César Manrique –al que, por cierto, le unía una profunda amistad con el arquitecto Fernando Higueras–.
Esas directrices son los contrastes de los materiales naturales, la vegetación, la importancia de los grandes lucernarios y las icónicas velas –emblema del centro comercial– sobre la fachada de jardineras. Con todo ello, se pretende hacer de La Vaguada «un centro comercial más visible y vivible desde el exterior y más amable y natural desde el interior«.
La reforma se desarrollará en dos fases: la primera tendrá lugar entre junio y octubre de 2023 y la segunda de enero a mayo de 2024, con una pausa en medio coincidiendo con la campaña de Navidad.
Por otro lado, en lo que se refiere al ámbito comercial, La Vaguada será uno de los emplazamientos que acoja una de las tres nuevas tiendas que Primark abrirá en Madrid.
La sostenibilidad de la nueva Vaguada
Según explican los responsables del proyecto, la apertura de grandes lucernarios no solo permitirá un mejor aprovechamiento de la luz, sino que mejorará también «la eficiencia energética, térmica y acústica en las zonas renovadas».
Los materiales empleados, además, serán de proximidad con baja huella de carbono, reciclados o reciclables y «favorecerán una imagen y ambientes naturales, ambientes saludables para el usuario y la creación de entornos favorables para la biodiversidad del ecosistema».